Flatulencia ¿Por qué ese horrible sonido justo ahora?

¿Tus flatulencias arruinaron tu noche? Cuesta imaginar esa escena donde estás en medio de una cena romántica, luciendo tu vestido favorito, la conversación fluyendo, y el ambiente perfecto. Pero de pronto, tu colon irritable y tus intestinos deciden interrumpir el momento con ruidos que te hacen sonrojar hasta las orejas. ¡Oh no! Justo cuando pensabas que la noche iba a ser mágica.

¿Te ha pasado alguna vez? No te sientas peor pues no tienes la exclusividad. Las flatulencias, son riesgos a los que todas estamos sometidas y pueden ser un verdadero saboteador de momentos especiales. Pero, ¿por qué sucede esto? ¿Por qué nuestro sistema digestivo decide rebelarse en el peor momento posible? Vamos a descubrirlo juntas.

¿Qué debemos saber sobre los gases?

Es perfectamente normal su presencia en nuestro aparato digestivo, haciendo necesaria su expulsión por la boca (eructo) o por el ano (flatulencia). Sus principales síntomas son: Los eructos, la hinchazón en el abdomen y los flatos.

¿Qué es el flato? 

El flato, lo que llamamos pedo, es la acumulación de gas metano, hidrógeno y dióxido de carbono que producen las bacterias que habitan en nuestro intestino grueso y que se hacen excesivos ante la ingesta de ciertos alimentos. Pueden tener olor más o menos desagradable o no tenerlo. Si padeces de trastorno de colon irritable, anorexia o bulimia nerviosa, estarás más propensa a sufrir de estos malestares.

¿Qué causa esos molestos trastornos digestivos?

Sabemos que hay muchas razones por las que nuestro sistema digestivo puede volverse rebelde. 

• Una de las principales culpables es la dieta

Comer alimentos ricos en grasas, frituras, o incluso ciertas verduras como el brócoli y las coles de Bruselas, puede producir gases. Y sí, esos deliciosos frijoles que tanto te gustan también están en la lista de sospechosos, al igual que las bebidas carbonatadas, que encabezan esta lista.

• El estrés es otro gran culpable

Cuando estamos nerviosas o ansiosas, nuestro cuerpo produce más ácido estomacal, lo que puede llevar a la indigestión y, sí, más flatulencias. Además, si comes demasiado rápido, tragas aire junto con tu comida, esto se llama “deglución” con lo que agravarás el problema. También tragamos aire inconscientemente al fumar o al salivar.

• Ni hablar de la intolerancia a la lactosa

Muchas personas no lo saben, pero este trastorno digestivo puede estar afectándote sin que te des cuenta. Si tu cuerpo no puede digerir la lactosa correctamente, el resultado es una sinfonía intestinal que no pediste.

¿Cómo evitar que tu noche de amor se convierta en una comedia?

Primero, respira profundo y relájate. Controlar el estrés es esencial para mantener tu sistema digestivo sin tormentas inesperadas. Tómate el tiempo para disfrutar de la comida, mastica bien, y no olvides hidratarte. El agua es tu mejor amiga cuando se trata de mantener todo en orden.

Lo ideal es que te prepares para el encuentro, lo que implica, ajustar tu dieta del día a las condiciones previstas para esa noche. No ingieras alimentos con grasas, granos, bebidas carbonatadas (soda), ni lácteos, pues como ya dijimos antes, son los principales causantes de este tipo de dolencias. 

Nuestro mejor consejo

Sin duda nuestro mejor consejo es el consumo de probióticos. ¿Has oído hablar de Zenbiotic de Zenzsual? Este suplemento está formulado especialmente para mantener tu sistema digestivo funcionando como un reloj suizo. Contiene probióticos que ayudan a equilibrar la flora intestinal, reduciendo así las flatulencias y otros síntomas molestos, incluso trastornos vaginales.

Por eso, Zenbiotic es tu aliado perfecto para mantener la calma en tu vientre, incluso cuando la noche se pone emocionante. Imagina disfrutar de una cena romántica sin preocuparte por sorpresas incómodas. Este suplemento te ayuda a mantener el control, para que puedas concentrarte en lo que realmente importa. Disfruta tu próxima noche de amor, libre de preocupaciones y ruidos molestos.

¡Presta atención!

Si sufres una pérdida de peso involuntaria, tienes una sensación de hinchazón o dolor torácico imprevisto, u observas sangre en tus heces fecales, consulta a tu médico de inmediato.

Y no olvides archivar estos consejos en tu fichero íntimo